En mi vida he pasado por varios desgarros...hoy tengo uno, compromete aductores, ingle, todo....Me he puesto hielo pero el dolor no pasa hasta unos 4 o 5 días más según el doctor y todos los amigos que se creen terapeutas....
Antes fueron desgarros en el alma, que de hecho aún tienen secuelas cada cierto tiempo, cuando fuerzo mucho las emociones y recuerdos que dejé reposando, se abre la herida y vuelta al reposo absoluto...
También me desgarré la piel completa, encerrándome a entender la técnica... esquemática, metódica cuadrada, recta, severa...se me desgarró todo el cuerpo y hoy curiosamente soy fiel seguidora de ella...de la técnica académica, responsable de este nuevo desgarro.
El desgarro es una abertura, rajar todo lo que se encuentra a su paso...una agresión.
Soy seca pa desgarrarme y desgarrar a veces... mi vida es un desgarro.
Y no lo encuentro malo, porque he tenido tantos que los soporto casi como anécdota...
La palabra se me hace entretenida, familiar, chora..."desgarro"...y sus acepciones son totales...: despedazar, rotura, rompimiento....
Entonces desgarrarse no es malo, pues luego viene el proceso de unir, rearmar, transformar, crear y curar esa herida que finalente te arma de corazas indestructibles e indesgarrables.
Es que cuando decides dedicarte con cuerpo y alma a trabajar con todo lo que eres, recibes mas lesiones de las que querrías o podrías imaginar, lesiones muchas veces incurables, lesiones concientes e inconcientes, dolores varios, hueones que se dedican a lesionarte, en fin...
Por ahora seguiré en cama, restaurando, imaginando y atenuando mis dolores, para por fin estar bien y lista para recibir otro desgarro, otras lesiones...
