Hay que decirlo!

Una buena amiga mía, me recomendó un libro hace algun tiempo atrás, de estos típicos que se ponen de moda y hablan de cómo somos las mujeres....a decir verdad no me entusiasmó la idea de comprarlo porque soy bastante exquisita a la hora de leer y siempre me inclino o por libros de política, por novelas cabezonas o por análisis humanos de hueones locos....
Afortunadamente tengo un compañero que está pendiente de todo cuanto hablo y me tiene demasiado caprichosa...asi que me lo regaló...y lo estoy leyendo...y temo decir que me ha hecho reír y tomarme la vida a carcajadas!!! por el solo hecho de ser mujer!...
Siempre las modas me han dado comezón...pero este librito describe a cada uno de los caracteres femeninos y las respuestas posibles que otorgamos en cada situación...
Puedo decir después de leer poco más de la mitad, que soy una mujer deseable jajaja...
Pero no cometeré el error de revelar el nombre de estos valiosos textos...Si se comenzara a correr la voz y llegara a manos de hombres (a nivel masivo) ya no sería entretenido el juego que mantenemos en una relación sentimental y por sobre todo, nos descubrirían...y no...nos conviene seguir como estamos.

En una ocasión tuve que aconsejar a Manola, mi amiga, porque se me estaba perdiendo entre tanta angustia...su renacer, el último de ellos, fue fabuloso!!! no sólo se acordó lo bella persona que era sino que además lo dejó florecer y ahora sin duda es la mas mina de la U.

Yo la verdad ni me arreglo, me carga el maquillaje, el plástico, etc. Pero siempre me ha ido bien sentimentalmente y no porque sea mina ni producida, sino precisamente por todo lo contrario...

Y leyendo las palabras de esta gringa, y viendo a la Manola debo decir que me siento afortunada de no sentirme parte del grupo de las mujeres corrientes, ni de las celópatas, ni de las brujas, ni de las torpes, ni de las santurronas, ni de las embusteras, ni de las solteronas, ni de las envidiosas, ni de las provincianas, ni de las amargadas, ni de las espías, ni de otras tantas epidemias ...
Sin duda soy parte de las mujeres malditas, y eso, concordamos con la Manu, es lo mejor que hicimos y podría habernos pasado.